sábado, 13 de diciembre de 2008

Cronopios y ave


Dos cronopios enamorados paseaban un día lluvioso y frío. Entre mimos y caricias vieron a un pobre pajarito caído que no tenía posibilidades de sobrevivir sólo, cariñosamente lo levantaron y llevaron a su casa, en una caja simularon un nido y con jeringas lo alimentaron. Calentito y con la panza llena, se durmió.
Pasaron los días y los cronopios se vieron obligados a buscar una caja más grande para el pichón, había crecido bastante y necesitaba espacio para ejercitarse y empezar a volar.
Así pasaron los días y las cajas, también pasaron meses, pasaron como seis.
Una gran muchedumbre se aglomeraba en la casa cronopial, todos esperaban que los protagonistas de la historia salgan, por lo menos que se asomen y así fué...de un momento otro la puerta se abrió y los dos cronopios enamorados posaron frente para las fotos y la prensa...felices con su ñandú.


Cronopia